Somos convocadas por Jesús a formar parte de un cuerpo apostólico que nos antecede; una Congregación portadora de un carisma, con el cual nos identificamos, y con una tradición propia, de la cual nos sentimos corresponsables.
El sentido de pertenencia nos lleva a compartir la vida en comunidad, introduciéndonos en una dinámica de inter dependencia e inter conexión, donde poco a poco, andando en este apasionante proyecto, se va creando una identidad que abarca la totalidad de nuestra vida y configura nuestro modo de ser y estar en el mundo.
En las comunidades Oblatas se comparte fe y vida. Rezamos juntas, discernimos las llamadas de Dios para vivir la misión en el trabajo de cada día, compartimos bienes y somos corresponsables por el bien estar de cada Hermana y la fidelidad a la misión.
Esta vivencia comunitaria requiere asumir los rasgos carismáticos básicos que emanan de la experiencia de nuestros Fundadores y recrearlos, por medio del diálogo y discernimiento en nuevos estilos de vida apostólica. Estilos que hoy se extienden y enriquecen desde la diversidad de realidades y especialmente con la contribución de el laicado que descubre su camino de seguimiento a Jesús en el carisma y misión Oblata.
En la Provincia Santísimo Redentor estamos presentes en 10 comunidades distribuidas en cuatro países.
Angola
- • Lobito: «Comunidad Nuestra Señora Madre de Angola”
Argentina
- Ciudad de Buenos Aires: “Comunidad Amor
Misericordioso” - Buenos Aires, Ramos Mejia: “Comunidad San Miguel
Arcanjo” - Santa Fe, Rosario: “Comunidad Jesús de Nazaré”
Brasil
- São Paulo, SP: “Comunidad Nuestra Señora Aparecida”
- Santo Amaro, São Paulo: “Comunidad Nuestra Señora del Perpetuo Socorro”
- Rio de Janeiro, Rio de Janeiro: “Comunidad Nazaré”.
- Belo Horizonte, Minas Gerais: “Comunidad Samaritana”
- Salvador, Bahía: “Comunidad Nuestra Señora de Guadalupe”
Uruguay
- Montevideo: “Comunidad Cristo Rey”