En mi experiencia, la pastoral vocacional debe estar próxima y conectada con los jóvenes. Es fundamental que ellos sepan que existen personas, pastorales e instituciones que se preocupan por su felicidad. Para eso, se disponen a escuchar, dialogar, acompañar y caminar juntos,
para que ellos puedan oír y sentir en lo cotidiano de su vida, por donde pasa la voluntad de Dios en su existencia.
La pastoral vocacional es un servicio que la Iglesia dispone para contribuir con los jóvenes en su discernimiento vocacional, sea cual sea su vocación. Es un servicio gratuito con el cual servimos con mucha alegría y contentas siempre con la presencia amorosa de la Divina Ruad, porque dentro de todos los jóvenes hay un universo de posibilidades en el cual Dios desea ser acogido, oído y amado.